Una nueva estrategia con la cual estafar a turistas en busca de reservar su alojamiento en cabañas en Villa Ventana, está comenzando a tomar impulso con la llegada de la Semana Santa y la dificultad en conseguir disponibilidad.
En los últimos años y hasta ahora, el grueso de las estafas virtuales se han venido desarrollando a través de la clonación de perfiles de alojamientos en las redes sociales, sobre todo en la plataforma de Facebook, en la cual cualquier cabañas en alquiler podía y aún puede ser replicada tomando las fotos de la auténtica pero con datos de contacto y reserva de un estafador. Dimos cuenta de ello en su momento, incluso con un audio del propio estafador en la nota «Estafadores están usando grupos en Facebook para el alquiler de cabañas (audios)«.
Este método de suplantación de identidad a través de Facebook, continúa desarrollándose con preocupante frecuencia hasta el día de hoy, siendo no pocos los casos que se siguen reportando en toda la Comarca. Esto está afectando a turistas descuidados y trayendo más de un dolor de cabeza a propietarios de alojamientos que se aventuran a publicar sus ofertas en grupos de alquileres donde los delincuentes encuentran la materia prima y el terreno para desarrollar las estafas.
Por suerte, con el pasar del tiempo y la masiva reiteración de esta metodología, el turista ya tiene bastante asimilado que a través de las redes sociales corre serio riesgo de ser víctima de una estafa, por lo cual recae en la conclusión de recurrir a sitios web de confianza de los destinos turísticos como Sierrasdelaventana.com.ar donde los alojamientos son verificados, y se contacta directamente con el dueño o administrador, sin intermediar comisiones extras de reservas online.
Pero ahora está comenzando a surgir una nueva manera de suplantar la identidad, o hasta solo suplantar los datos de contacto en publicaciones genuinas de los prestadores.
El primer reporte de una estafa con esta modalidad en la Comarca
Anoche a última hora del domingo, un cliente de Sierrasdelaventana.com.ar se comunica telefónicamente para solicitar orientación sobre un reclamo de una turista que supuestamente tenía una reserva hecha en su establecimiento, pero canalizada en este caso no por las redes sociales sino la plataforma de Google Maps.
Antecedentes de esta nueva modalidad
El aprovechamiento de una vulnerabilidad Google Maps en la manera de alimentar la información que se exhibe en sus “tarjetas informativas” de negocios, ya tenía antecedentes en otros países y en el rubro “bancos”, en donde los estafadores suplantaban los datos de contacto de esos bancos en sus fichas, y de esa manera obtenían los datos reservados de sus clientes.
¿Cómo hacen la suplantación de identidad y/o de contacto en Google Maps?
Lo primero que debemos saber es que las “tarjetas informativas” de la aplicación para un comercio o servicio, en las cuales vemos los datos del local y las reseñas y demás información sobre él, pueden ser y son creadas o modificadas por cualquier persona (incluso ajenas a ese establecimiento) a través de “Sugerir una corrección”.
Puntualmente en el rubro turismo, un turista puede querer dejar un comentario de su experiencia en dicho establecimiento y al hacerlo estar creando en ese momento la tarjeta informativa en el mapa, aún si ésta ya estuviera creada en otro punto del mapa.
Esta es la primera estrategia de suplantación de identidad, pero no la única como veremos a continuación.
En el supuesto caso de que tanto la tarjeta informativa, las opiniones, y el teléfono o sitio web (al cual muchos cliquean o llaman casi de manera instantánea) sean auténticos, esta información puede ser editada por cualquiera sin casi ningún tipo de verificación.
De esta manera, el delincuente no solo se sirve de la aplicación a través de la suplantación de identidad con la creación de una tarjeta falsa, sino que además puede irrumpir en las tarjetas auténticas de los prestadores, modificando la información de contacto dispuesta en ella, canalizando al turista hacia sus medios de contacto.
En el caso puntal reportado ayer domingo a Sierrasdelaventana.com.ar el estafador aprovechó la existencia de una tarjeta ya creada por un turista y con varias opiniones, con una dirección y geolocalización inexacta del establecimiento en el mapa (lo que hizo que el dueño no supiera de su existencia), y colocó un sitio web fraudulento creador a través de la misma herramienta de Google, en donde exhibía los datos de contacto falsos para canalizar la estafa.
Vulnerabilidad pendiente de resolver
Si bien Google trata de tener sus servicios actualizados continuamente, a veces se le dificulta, y más en algunas aplicaciones como por ejemplo Google Map. En esta herramienta, los cambios constantes en los barrios: nuevos edificios, tiendas que abren o que cierran, repercuten a un ritmo que el mismo Google es incapaz de seguir.
Según datos recopilados de otras fuentes respecto a esta modalidad de estafas, Google ha admitido que “hay algunas imprecisiones o ediciones incorrectas, y que cuando pasan, tratan de solucionarlo lo antes posible”.
“Principalmente, permitir a los usuarios que sugieran ediciones proporciona información completa y actual, pero reconocemos que a veces hay imprecisiones ocasionales o ediciones incorrectas sugeridas por éstos. Cuando esto pasa, hacemos lo posible para arreglar dicho incidente lo más rápido posible» (Representante de Google).
Con motivo de eso Google puso en marcha una estrategia para evitar estas estafas y que hubiese datos fraudulentos, sin embargo no parece que haya dado resultados efectivos hasta ahora.
¿Qué medidas preventivas se pueden tomar?
Entiendo que para muchos lectores seguramente esta nueva metodología les resulte mucho más compleja de digerir y sobrellevar, para evitar ser alcanzados por un hecho en sus negocios.
El primer paso es realizar la búsqueda por nombre y adicionalmente por geolocalización, de posibles “tarjetas informativas” de su alojamiento en Google Maps. Luego asegurarse de que solo exista una y sea en la localización correcta, y si nunca había accedido a ella, buscar allí el enlace que dice “Reclamar este negocio” o «Eres propietario de este negocio. Reclamar ahora» y seguir los pasos que el sistema le indique para tomar un relativo control de la publicación.
De todos modos y cumplidos los pasos anteriores, le demandará mantener un chequeo frecuente de la información expuesta en la tarjeta (y eventualmente en futuras posibles nuevas tarjetas), al menos hasta que Google encuentre la manera de reforzar los mecanismos de verificación de los cambios sugeridos por personas ajenas al establecimiento.
Desde nuestro medio, recomendamos a nuestros lectores, seguidores y suscriptores que contraten SIEMPRE desde sitios reconocidos como el nuestro u otro que sea de su confianza, donde encontrarán un completo índice de alojamientos verificados, o sino chequear la información publicada en las redes o aplicaciones, ANTES DE ABONAR RESERVAS.
Por último, te pido que comentes abajo si fuiste víctima de una estafa y como la realizaron, y además compartas esta publicación para colaborar con la difusión y evitar así futuros engaños o estafas recurrentes en nuestras sierras. Entre todos podemos crear un ambiente virtual mas seguro para el turismo y los prestadores.
También quiero recordarles que en caso de ser engañado, lo aconsejable es hacer la denuncia policial, y a la Dirección Nacional de Defensa del Consumidor (0800-666-1518), el Ministerio de Turismo de la Nación (0800-555-0016), la Subsecretaria de Turismo de la Provincia de Buenos Aires (Calle 53 N 510 – CP 1900. +54 (0221) 429-4038); y la Defensoría del Pueblo de la Provincia de Buenos Aires (Tel: 0-800-222-5262).
Sergio Marto
Director del Portal de Turismo y Cultura
www.sierrasdelaventana.com.ar